En Corazón Salvaje Angelique Boyer da vida a Jimena/Estrella aquella que ha conquistado el corazón de Gabriel (Sebastián Zurita).
Pero ¿cómo es en realidad esta joven actriz una de las más destacadas de su generación y una de las más bellas mujeres de México?
ENTREVISTA CON ANGELIQUE BOYER
En los últimos cinco años, Angelique Boyer no ha parado.
De una telenovela se liga a otra, de Rebelde a Muchachitas Como Tú, de ahí a Alma de Hierro y ahora a Corazón Salvaje.
Con esa presencia constante en la pantalla chica cualquiera pensaría que la actriz de 21 años de edad nacida en la comuna de Saint Claude, en el departamento de Jura, Francia, busca ser una de las figuras más conocidas en México, pero ella asegura que la fama es una debilidad que no se le da.
“Si de algo en la vida estoy segura es de que yo no vengo a ser actriz para ser artista y ser famosa, yo vengo a ser actriz para interpretar un personaje y llegarle al público y a través de eso ganarme su cariño”, expresa.
“Digo no a la fama porque ésta sube y baja, además no es la parte más padre de la carrera, es mucho más padre que llegue una señora y te diga: ‘A mi hija le pasó lo mismo que a Sandy’ (su personaje en Alma de Hierro), eso me va a durar toda la vida”.
La actriz, quien también participó en el melodrama Corazones al Límite (2004), en la serie de Mujeres Asesinas y en la película La Leyenda de la Llorona, afirma que su objetivo es tener una carrera respetable y no ser sólo una cara bonita.
“No sólo soy actriz y estoy en una pantalla porque quiero que la gente me reconozca en la calle, yo sé el compromiso que es, por eso quiero venir a hacer algo a este mundo”, afirma.
“Si lo quieres tomar como mensajero, angelito o como lo que tú quieras está bien, pero lo importante es que tengo la oportunidad, a través de la pantalla, de transmitir algo más, y no es fama, dinero, éxito, esas cosas no duran, no es lo que te hace ser en 15 años el mismo ser humano, y lo que a mí me interés es conmover al público”.
Sin perder la emoción de ser parte de Corazón Salvaje, un proyecto muy apoyado por Televisa, Angelique se muestra tranquila y reflexiona en lo que ha sido su paso por la empresa a la que pertenece.
“Nada me ha caído del cielo”, asegura la actriz, “son 13 años de estar dentro de la empresa, de ganarme un lugar, no de cara bonita, sino como actriz. Yo a eso vengo a trabajar.
“Llevo cinco años que no he parado, no me he quedado sentada, este asunto es de buscar trabajo y de picar piedra, de ganarse un lugar y una competencia, pero no con los demás porque cada quien tenemos un lugar, una competencia conmigo misma de superarme”.
Añade que hoy en día es muy difícil destacar en cualquier puesto, por eso ella mantiene una lucha constante de superación.
Por su propia naturaleza, los artistas buscan el reconocimiento, que no tiene nada que ver con la fama.
“Hay diferencias”, explica, “yo creo que una mujer como Diana Bracho o Cynthia Klitbo no se mueren porque les vengan a pedir un autógrafo, pero sí que esa persona diga: ‘Es una buena actriz, me gustó esta escena, me gustó esta obra de teatro’. Creo que eso dura más”.
Angelique no es de las que se preocupa por saber qué rating registran las producciones en las que participa.
“Solamente son números y en Alma de Hierro me di cuenta”, comenta. “Imagínate, yo venía de Rebelde, que tenía números altos, además de cariño de la gente y pasé a Muchachitas Como Tú, números no había, luego Corazones al Límite que nadie la veía.
“Entro a Corazón Salvaje, se prometen los mejores números de muchos años, ya ves… por eso yo creo que no sólo está en eso de los números, creo que la gente se encariña”.
Fuente: E L NORTE GENTE
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